Consejos para regar árboles
Preparar el jardín para el otoño
El otoño ya está aquí y las noches se alargan y se hacen más frías. El invierno se acerca. ¿Qué planes pueden hacer los propietarios de jardines durante el otoño? ¡Prepararse para el invierno, por supuesto!
Labores de plantación y trasplante
En otoño también se pueden plantar nuevos ejemplares con la conciencia tranquila. Será la última oportunidad de poner algo de color en el jardín antes del invierno. Para las rosas, por ejemplo, el otoño - antes de la primera helada del suelo - es el momento de plantación ideal.
Plantar bulbos
Los arbustos y matas pueden recortarse aproximadamente una cuarta parte de su tamaño. No obstante, esto puede variar dependiendo del tipo de arbusto o mata. Encontrará más información en las etiquetas de las plantas o en su centro de jardinería local.
Recortar setos
El césped
En invierno, la humedad, las bajas temperaturas y la debilidad del sol afectan al césped. Por eso, el césped necesita mimos y cuidados antes de que empiece la estación fría. Las hojas caídas en otoño deben ser retiradas del césped de forma regular. Las hojas que se dejen sobre el césped lo privarán de luz y favorecerán la formación de manchas secas y parduscas y la aparición de musgo. Corte el césped por última vez más o menos a principios de noviembre. Asegúrese de no dejar la hierba con menos de 5 cm, pues el césped más largo puede aprovechar mejor una menor cantidad de luz solar. Conseguirá así una mejor resistencia contra malas hierbas y musgo.
También se recomienda utilizar un fertilizante de otoño. Los fertilizantes de otoño suelen tener un bajo contenido en nitrógeno y un alto nivel de potasio. La mayor cantidad de potasio refuerza el césped y aumenta su resistencia a las heladas. No conviene utilizar los fertilizantes de césped tradicionales en otoño, pues contienen gran cantidad de nitrógeno y hacen que el césped crezca más rápido, lo que a su vez lo hace más sensible a las heladas.
Naturalmente, hay otras pequeñas tareas que debemos realizar antes de la primera helada:
• Arriates, rosas y otras plantas sensibles a las heladas deberán ser cubiertas con broza u hojas, o bien envueltas en plástico de burbujas o similar.
• Desentierre los bulbos de verano, como las dalias, y guárdelos en una caja ventilada en el sótano.
• Lleve las plantas de tiesto al interior o colóquelas en un emplazamiento protegido.
• Cierre las conexiones del agua y vacíe grifos y dispositivos de riego para que el agua congelada no pueda provocar daños.
• Desmonte las bombas del estanque y en caso necesario, instale una bomba antiheladas.
Al llegar el invierno, los jardineros pueden disfrutar de una relajante pausa de su trabajo. Pero no olvide: ¡antes de que se dé cuenta ya será momento de volver a la carga!
Fuente: Gardena