Cómo plantar Aloe Vera

Lo primero que debemos tener en cuenta a la hora de plantar aloe vera es la época y el clima. Este tipo de plantas requieren de un lugar que no sea ni muy húmedo ni muy frío. Por ello, lo ideal es plantarla en una maceta de barro o terracota porosa. Asimismo, la mejor época del año para hacerlo es el otoño o la primavera.

La mejor forma de plantar aloe vera es a partir de uno de los brotes o hijos de una planta adulta. Debes saber que sin raíz ni semillas de la misma, no es posible generar una nueva. Las semillas de aloe vera son más complicadas de conseguir, por esto la mejor opción es hacerlo mediante uno de los hijos. Para ello, coloca en la base de la maceta un drenaje de grava de unos dos dedos de alto para asegurar que crecerá en las condiciones más óptimas para ella.

Luego, deberás añadir tierra común de jardín y de turba a partes iguales. Añade también abono orgánico, nunca químico. Si tienes una planta adulta y es de aquí de donde quieres sacar los hijos, lo primero de todo es identificarlos. Los brotes son aquellos que han ido creciendo alrededor de la planta madre, son más pequeños (deben medir entre 15 y 20 cm). Retira la planta de la maceta, selecciona uno de los hijos, agarra todas sus hojas y, con un cuchillo de untar para evitar dañar la planta, empieza a cortarlo con mucho cuidado.

Es muy importante que no dañes la raíz del brote, puesto que constituye la parte principal para que pueda crecer una nueva planta. Cuando lo tengas, solo debes introducirlo en la maceta y cubrir la planta de tierra hasta el nacimiento de las hojas. Es aconsejable empezar a regarla pasadas dos semanas desde su plantación. En este artículo te contamos cómo cuidar una planta de aloe vera para que conozcas la periodicidad con la que debes regarla.

Debes asegurarte de que la planta madre es aloe vera y no otra de las variantes del aloe, puesto que no cuentan con las propiedades medicinales y cosméticas de la primera. Es recomendable que dejes la planta nueva en un lugar donde reciba la luz del sol y, si es posible, sea un tanto húmedo.

Durante la primera etapa de la plantación, la humedad favorece su crecimiento, por ello no debe dejarse en un sitio frío.

Ten en cuenta que cuando la planta sea adulta (entre los dos y cinco años después de haberla plantado) deberás separar a la madre de los hijos y repetir todo este proceso para reproducirla. Y, si en lugar de en una maceta quieres plantar aloe vera en tu jardín, es importante que dejes una separación entre planta y planta de dos metros para evitar que se entrelacen sus raíces.

Adquiere plantas de Aloe que no sean tan jóvenes pues es a partir de los tres años de vida que sus propiedades son ideales.

En principio debes cortar únicamente las hojas que necesitas para ser usadas de inmediato en un breve período de tiempo, pues si dejas pasar los días el pedazo comenzará a marchitarse y perder sus propiedades.

Corta siempre las hojas de abajo, cercanas a la base de la planta, pues son las más antiguas y por tanto las que pueden aportarte más beneficios.

Utiliza un cuchillo muy afilado o una buena tijera de podar e intenta cortar la hoja lo más cerca del tallo que te sea posible pues en esta área la hoja es mucho más delgada lo que facilitará la tarea.

Si se trata por ejemplo de atender una quemadura o cualquier otra afección cuyo tratamiento involucre varios días, usa el pedazo que requieres y el restante envuélvelo muy bien en papel aluminio y guárdalo en el congelador, pero ten en cuenta que solo puedes preservarlo como máximo cinco días, después será de poca utilidad.

Fuente: https://www.uncomo.com/